Para inaugurar la temporada en Apertura 2021, tenemos el gran placer de presentar Emblemas y Atavíos de José Miguel Pereñíguez (Sevilla 1977), una exposición individual que no pretende únicamente centrarse en la obra más reciente de este artista, sino mostrar la diversidad de registros y lenguajes que conforman su producción. Con este motivo, Michel Soskine Inc. ha contado con la colaboración del también artista Guillermo Paneque y del propio autor para preparar un montaje a partir de trabajos significativos tomados de distintos momentos de su trayectoria.
De entre todos estos trabajos, los más antiguos nos cuentan una muy personal historia de la cultura, reconstruida toscamente en la intimidad del taller mediante pequeñas esculturas y maquetas. Un dibujo venía siempre, a continuación, para levantar acta de esas reliquias y vestigios, abriendo un espacio de incertidumbre sobre su procedencia, su autenticidad o sobre la propia naturaleza de lo representado.
En ocasiones el propio estudio se propone como tema. A partir de restos y piezas desechadas, el artista juega a establecer un orden ilusorio imitando la apariencia de aquellas alegorías renacentistas que presentaban el saber de la época como una melancólica reunión de artefactos.
Esta fascinación por los objetos marca, además, la producción escultórica de Pereñíguez. Dicha producción se despliega como una serie de elementos construidos ya a escala humana: máquinas simples, mobiliario o utensilios de trabajo embellecidos como para un posible uso ceremonial. Son piezas, elaboradas con sumo rigor en
madera y piel, que se muestran al espectador como ejemplos de un diseño imposible, ensimismado, ironizando sobre la relación entre función, forma y manufactura.
El destino de estos objetos a veces va más allá de la sala de exposiciones. Algunas de las piezas aquí mostradas han sido creadas para la escena y utilizadas en distintas colaboraciones con el bailaor sevillano Andrés Marín, especialmente en La Vigilia Perfecta, presentada en el Monasterio de Santa María de las Cuevas en el curso de la Bienal de Flamenco 2020 de Sevilla. Coincidiendo con las fechas de la exposición, del 13 al 17 de octubre de 2021 en los Teatros del Canal de Madrid, podremos ver los frutos de su segunda colaboración escénica: Éxtasis/ Ravel (show andaluz), nuevamente de la mano de Andrés Marín.
De una forma cada vez más decisiva, los objetos de Pereñíguez remiten al cuerpo que los maneja o que los lleva puestos. Son, como reza el título de la exposición, verdaderos atavíos aunque, más que servir de adorno, pretenden implicar a su posible portador en el desarrollo de un ritual aún por descubrir. O bien, con la implicación de ambos (cuerpo y objeto), fijar en nuestra mente una nueva imagen, tan enigmática en su lectura como todos esos jeroglíficos o emblemas que se esconden en sus dibujos.
Así pues, más allá de la diversidad de cuanto aquí se muestra, se puede rastrear una razón común a tanto empeño del artista por construir y representar: poner en evidencia como la forma nos prepara para salir al encuentro de la realidad mediante mil trampas, artilugios, figuras y estrategias.