Inauguración 25 de noviembre de 19h a 21.30h
Michel Soskine Inc. presenta una nueva exposición de Antonio Crespo Foix en Madrid.
Antonio Crespo Foix (Valdepeñas, 1953). Licenciado en Bellas Artes por la Universidad de Valencia.
Su obra continúa con la “tradición” de la escultura aérea con una lectura poética, puesto que las formas tangibles, originadas en la mente del escultor son poesía visual.
Las obras que se exponen nos deleitan desde distintos puntos de vista; y lo que se nos presenta tan volátil, no es sino una serie de epidermis de material superpuesto y ensamblado. La complejidad material y formal se extrapola a su alma evanescente, de transparencia, de irrealidad, en su más pura esencia.
Volviendo a la idea de la tradición de la escultura aérea (de la cual nos habla Juan Manuel Bonet en “Historia de lo leve” texto escrito expresamente para el catálogo de una exposición que tuvo lugar en Michel Soskine Inc.) y de esta poesía visual contemporánea, Bonet, nos conduce a artistas como Calder, Julio González, Ángel Ferrant, Moisés Villèlia, Adolfo Schlosser, entre otros. Además, Bonet, enlazando con esta línea de la escultura sutil, “poco sólida”, en sus diversas formas y contextos, la continúa hasta nuestros días con la obra de Crespo Foix.
La obra de Crespo Foix siempre oscila entre lo inmaterial, lo etéreo, lo sutil o lo ingrávido, entre muchos otros adjetivos que vibran en esta misma sintonía. Su obra escultórica nos transporta a una atmósfera atemporal, evanescente, a través de los materiales que emplea como son alambres, alfileres, cobre, bambú, entre otros, creando una urdimbre que da como resultado visual una especie de textura aérea.
El microcosmos que el artista crea no es producto, en ningún caso, de lo casual, es más bién fruto de su relación directa con su entorno manchego, pues en sus esculturas hay viento, hay nubes, …
Enrique Andrés Ruiz en su texto “El Peso de los Vilanos”, escrito para el catálogo de la exposición “Cuerpo de Nube”, celebrada en el Museo de Santa Cruz de Toledo en 2019, insiste en la idea de nube como elemento epicentro. Además, títulos de sus esculturas como Nube, Red de Aire, … nos definen su particular mundo en el que sus nubes sugieren una suerte de nidos enmarañados dónde también habitan nieblas.
“AERIUM” conforma una metáfora del tiempo y la existencia misma, a través de diez esculturas donde la minuciosidad y la materia/inmaterial son los dos puntos de partida hacia una exploración de una cosmología conformada por luces y sombras y una niebla que, como atmófera inasible, no cesa.
Estamos ante una muestra de formas aéreas tal y como indica el propio título escogido para la exposición; formas que juegan con lo intangible y difuso en contraposición a lo terrenal. Un je ne sais quoi volátil, enigmático, pero bello en su más pura esencia.
Antonio Crespo Foix, uno de los escultores españoles más reconocidos en el extranjero, tiene obra en colecciones públicas y privadas en Alemania, Bélgica, Estados Unidos, Francia, Hong Kong, Inglaterra, Italia, Malasia, Portugal y Suiza.